Otra visión! El puente Chaco-Corrientes no está en riesgo estructural, pero preocupa el tránsito pesado

Para el especialista es fundamental implementar controles estrictos de carga y garantizar el mantenimiento constante de la estructura.

Benicio Szymula, exsecretario de Obras Públicas, docente universitario e investigador, analizó en NORTE TV el estado actual de transitabilidad del Puente Belgrano. Según su observación, no existen problemas estructurales graves que pongan en peligro la seguridad de la infraestructura vial. Sí alertó sobre el creciente peligro que representa el tránsito, especialmente el de camiones con sobrecarga, para la integridad de la obra y para la seguridad vial.

 

Según él, es fundamental implementar controles estrictos de carga, garantizar el mantenimiento constante de la estructura y mejorar la gestión del tráfico en la zona.Desde el punto de vista estructural, Szymula fue claro: "El puente no presenta síntomas de fallas. Existen controles permanentes realizados por especialistas, tanto de Vialidad Nacional como por la Universidad Nacional del Rosario. Las inspecciones son exhaustivas, se monitorean fisuras y se realizan recorridos internos por las estructuras huecas del puente". Según el ingeniero, el puente es revisado de manera constante.Sin embargo, destacó que, aunque el puente no presenta fallas evidentes hoy, eso no garantiza que no pueda haber problemas en el futuro. "Un puente similar en Brasil, con diez años más de antigüedad, se desplomó a finales del año pasado", recordó, lo que resalta la importancia de la prevención y el monitoreo constante.

 Tránsito pesado, una preocupación creciente

A pesar de que la estructura del puente se encuentra en condiciones aceptables, Szymula advirtió que el principal peligro radica en el tránsito pesado, especialmente el de camiones que circulan con sobrecarga. Este es un problema común en Argentina debido a la falta de controles adecuados. "Lo único que funciona como control es el que está entre el Riachuelo y El Sombrero, pero las rutas están llenas de ahuellamientos, que no los producen los autos particulares, sino los camiones con sobrecarga", señaló.

La sobrecarga no solo genera daños a las rutas, sino que también incrementa el riesgo de accidentes. "Cuando los camiones circulan con sobrecarga, tienen una alta probabilidad de que los frenos fallen", explicó el ingeniero. Además, la potencia del motor también se ve reducida, lo que obliga a estos vehículos a circular a menor velocidad. Para Szymula, la solución a este problema pasa por establecer controles de carga antes de la estación de peaje, en un espacio que existe antes de ingresar al puente.

Así, propuso que los controles para evitar la sobrecarga en camiones sean establecidos en los puntos previos al puente. "No se puede impedir que los camiones circulen, pero sí se deben aplicar medidas para garantizar que cumplan con las normativas de carga y potencia", indicó. Además, consideró que la falta de un ente coordinador que unifique las acciones de control y vigilancia del puente es otro de los problemas.

El reciente accidente en el puente generó preocupación, pero el ingeniero Szymula lo consideró afortunadamente menor, comparado con los posibles riesgos si hubiera ocurrido en otro sector de la estructura. "Si el accidente hubiera ocurrido en la zona de obenques, que son los cables que sostienen la zona central, la historia podría haber sido muy diferente", advirtió.

El ingeniero también se refirió a la necesidad de un segundo puente, un proyecto que ya está en carpeta pero que, según él, enfrenta obstáculos en cuanto a gestión. "El segundo puente está demasiado lejos todavía. Si conseguimos la financiación, tenemos por lo menos cinco años por delante", expresó. En su opinión, la prioridad debe ser recuperar el puente actual, mientras se avanza en la construcción de una nueva estructura para descongestionar el tránsito.

Con información de Norte Chaco