CALENDARIO. Como todos los años, el 24 de septiembre se declaró feriado en dos localidades de la provincia de Corrientes.
Este martes 24 de septiembre se celebra el día de Nuestra Señora de la Merced. Por ende, en Corrientes Capital y en la ciudad de Mercedes, será feriado provincial (no habrá escuelas ni administración pública).
En la Capital se encuentran en plena preparación para celebrar las fiestas patronales de la Patrona de la ciudad. Este año, la tradicional celebración adquiere un carácter especial para toda la Arquidiócesis: durante la Misa central, el Nuncio Apostólico en Argentina, monseñor Miroslaw Adamczik, impondrá el Palio Arzobispal al arzobispo de Corrientes, monseñor José Adolfo Larregain.
El lema elegido para esta edición es “Con María, peregrinos de esperanza”, y desde comienzos de mes se vienen desarrollando múltiples actividades religiosas y comunitarias en el Santuario de la Merced, epicentro espiritual de la celebración.
Actividades previas
Las festividades comenzaron con la tradicional entronización de la imagen de la Virgen y continúan hasta el 23 de septiembre, con rezos del Santo Rosario, Misas, novenas, espacios de confesión y jornadas temáticas dedicadas a distintos sectores de la comunidad.
Cada día está orientado a intenciones particulares: se han bendecido a autoridades provinciales y municipales, familias, jóvenes, enfermos y adultos mayores, fuerzas armadas y de seguridad, servidores de la salud, y grupos parroquiales, movimientos y comunidades Pro Vida, entre otros.
Celebraciones del 24 de septiembre
La jornada central iniciará con Misas desde las 7 hasta las 11 de la mañana. A las 16 horas se realizará la solemne procesión y Misa central, presidida por el Nuncio Apostólico, durante la cual monseñor Larregain recibirá el Palio Arzobispal, un símbolo de comunión con el Papa y de autoridad como arzobispo metropolitano.
El día concluirá con celebraciones eucarísticas a las 20 y 22 horas.
Esta fiesta no solo convoca a los fieles de la ciudad de Corrientes, sino que también representa un momento significativo para toda la Iglesia local, al reunir a la comunidad en torno a su fe y su identidad mariana.
